Colchonetas, hinchables, casas de bolas y mesa de chuches. Resulta el pack perfecto para tener el éxito asegurado en la celebración de un cumpleaños o fiesta infantil. Pero seguro que ya nos cuesta más imaginar que muchas empresas echen mano de este tipo de recursos de entretenimiento como forma de dinamizar las cenas navideñas de sus empleados.
«Es un auténtico viaje a la infancia, aquí saltan los mayores», nos comentaba divertida Teresa Rodríguez, gerente de Event, una empresa que se dedica a la gestión de eventos en Ourense. Ella no dudó en organizar un acto con estas características para una empresa que quería que su cena de navidad fuese distinta y original. «Lo pasan genial y es todo un éxito», asegura, aunque lo recomienda para un grupo no excesivamente numeroso de empleados, por ejemplo la gente que compone un departamento o empresas pequeñas.
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La organización de un gran bingo es otra fórmula ensayada de éxito, pero en este caso cuando el número de empleados es más numeroso, junto con celebraciones animadas de sorteos de premios y regalos.
Eva Olmos, propietaria de Vorec, empresa también dedicada a la gestión de eventos como cenas de empresa nos recomienda para grupos amplios la sustición de las cenas por los cocktails de empresa. Éstos se organizan de pie, moviéndose entre mesas donde se disponen las bebidas y la comida, lo que permite moverse e intercambiar charla con unos y otros. Y también, claro está, evitarse. Otra gran ventaja de los cocktails sobre las cenas organizadas en restaurantes donde a penas te puedes mover del sitio es que impiden que te aburras más que en acuario de almejas, según los compañeros de asiento que te toquen en gracia.
La cena de Navidad, en especial si sois un grupo compenetrado y bien avenido, puede ser la excusa perfecta para pasar una velada totalmente diferente a cualquier noche de cena. Esa fue la idea que les rondó por la cabeza a un grupo de ocho empleadas, cuando pidieron a Eva que antes de llegar al restaurante, les organizase un recorrido por las calles del centro de la ciudad de Ourense en limusina, a techo abierto y degustando cava.
Actuaciones de magos, monologuistas o actores infiltrados, dúos, grupos de música o una disco-móvil (Teresa Rodríguez asegura que en estas ocasiones la pachanga nunca falla) son opciones que comentan ambas profesionales para transformar un evento que, si en principio nos puede parecer comprometedor o incluso un incordio, acabe siendo una celebración divertida y una oportunidad para fortalecer la relación y el compromiso en la empresa.
Aún así, cuando se opta por celebrar la cena o el encuentro navideño de los empleados en restaurantes o en la propia empresa ajustándose a un formato más clásico, conservará su encanto y efecto, si se trabaja la decoración y los detalles en el lugar de reunión, como nos comenta Inés Toyos, la gerente de The Day Celebraciones. «Mimar el detalle y el impacto visual y hacer un regalo de bienvenida a los empleados, como bandejitas con chocolates y turrones», según Inés, son fórmulas bien recibidas por los trabajadores.
Guirnaldas o centros de mesa son motivos navideños adecuados para la época. Inés dice que este año vuelve a recurrir a los dorados y los plateados, tan propios de estas fiestas, igual que la seda o el tafetán, para confeccionar lazos, acompañados de elementos naturales, como el pino. «Lo importante no es un gran cantidad ni el tamaño, sino una disposición acertada para que a la gente se le vayan los ojos naturalmente, pero sin interrumpir o recargar los espacios» nos recomienda.
Estas son las fórmulas que aplican los y las profesionales del sector, y vosotros, ¿cómo lo vais a montar?.
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